El pádel es una disciplina de alta exigencia que requiere fuerza, velocidad, inteligencia y horas de sudor. Pero antes, las parejas de jugadores deben buscar los implementos profesionales para jugar con seguridad y confianza, que optimicen toda su energía y los lleve a vencer a sus adversarios.
El nuevo deporte «blanco»
Desde la celebración del World Pádel Tour en 2012, el pádel como disciplina oriunda de México, ha ganado popularidad y los equipos que la practican se ha motivado a profesionalizarse en las respectivas federaciones de cada país, así como también el surgimiento de las tiendas de pádel online más variadas para adultos, jóvenes y niños.
Los atletas que desean a comenzar a practicar este deporte por diversión o competición, saben que las parejas deben ganar 2 sets para vencer en una partida. Si los equipos logran empatar, deben seguir jugando con el mecanismo del desempate conocido como el tie-break. A su vez, los cambios de campo ocurren cuando los juegos suman una cifra impar y durante el desempate, el cambio debe hacerse cada 6 puntos.
El padelista mexicano Enrique Corcuera fue el que dio vida a este deporte en la década de los sesenta como una alternativa al tenis. Para jugarlo es necesario una pala y la pelota con sus específicas medidas y hacerlo en pareja. Es importante entrenar con la debida indumentaria por salud y para lograr una alta competición gracias a la disciplina de cada uno de los jugadores y del trabajo en equipo.
Los profesionales expertos recomiendan ciertos trucos básicos para evitar la derrota con facilidad por ejemplo evitar sacar siempre de un mismo lado y medir en el primer set, cuál es el punto débil del saque del adversario. Así como también, alternar con la pareja en dependencia de si es zurdo o diestro el lado de juego. Se recomienda que el zurdo juegue en el lado derecho de la pista para dejar la pelota en el medio de la pareja.
No se debe menospreciar la importancia de cumplir con la sesión de ejercicios de calentamiento y de estiramiento previos a cada partido. Acondicionar el cuerpo es parte de prevenir lesiones que podrían terminar con la carrera prematura de cualquier joven. Así como también poner en práctica las posturas correctas en cada uno de los partidos e hidratarse de forma constante.
No es solo cuestión de estética
No se puede practicar un deporte como el pádel con cualquier prenda, sobre todo en lo relativo al calzado. No hay que olvidar que se trata de un deporte dinámico donde la pisada es fundamental tanto para el rendimiento en el juego como para preservar posibles lesiones, por eso se no sirven cualquier par de zapatillas para la práctica de este deporte, aunque sean zapatillas de tenis. Para quién esté iniciando las zapatillas de puntitos en la suela, son las que permiten mayor agarre y tracción, factores indispensables para comenzar a aclimatarse en este deporte.
En cuanto a la indumentaria lo más importante es usar prendas que transpiren adecuadamente y que a su vez pesen poco, sobre todo si la práctica se realiza en verano. Esta es una tendencia que se mantendrá durante el próximo 2019, donde los valores que más se buscan en la práctica de este deporte es la comodidad. Seguirán siendo tendencia los pantalones cortos con bolsillos para que los jugadores puedan guardarse las bolas. Las camisetas, por su parte deben mostrar también un diseño llamativo y la mejor opción es aquella que se ajusta al cuerpo, facilitando unos movimientos más dinámicos.
Palas de pádel para jugar como un experto
El estilo de juego también determina cuál es el tipo de pala indicada: las de control y de potencia. La primera dirige la pelota exactamente donde se desea golpear, tanto con control y estabilidad. Es ideal para el golpe tipo globo. Y la segunda es para batear la bola fuera de la pista con los golpes tipo smash, bandeja y volea.
Es importante que el diseño del equipamiento cumpla con las exigencias reglamentarias de la federación y a nivel internacional. Al comprar una pala de pádel, el jugador tiene que verificar que la paleta cumple con las medidas legales: 38 mm de grosor, 45,5 cm de largo y 26 cm de ancho. Sus agujeros ubicados en el centro deben tener entre 9 y 13 mm de diámetro cada uno.
No pueden incluir incrustaciones decorativas en caso de querer jugar una partida oficial porque cualquier detalle extra de la pala afecta directamente la dirección de la pelota, ya sea en ventaja o desventaja de las parejas. Por su parte, la pelota de pádel es una esfera de goma que tiene que pesar entre 56 y 59 gramos y medir entre 6,22 y 6,77 cm. De esta manera, rebota hasta 145 cm lanzada desde 2,50 metros.
Consejos para comenzar a practicar pádel
Al empezar a entrenar para una actividad física de alta exigencia calórica, es aconsejable invertir en clases dictadas por profesionales en el área para aprender la técnica, el entrenamiento, el calentamiento previo y el enfriamiento posterior del partido. Junto a esta persona, se establece un plan de trabajo con objetivos precisos. Los que están comenzando en el pádel, pueden seguir estas recomendaciones.
- Realizar sesiones en solitario para mejorar los golpes y detectar errores en los movimientos de saque y rebotes. Solamente se necesita estar frente a la pared y golpear la bola hasta lograr un mayor control, velocidad y potencia.
- Aprender a hacer sesiones para «pelotear» junto con un compañero. Ambos se deben pasar pelotas encima de la red y usar solamente un lado de la cancha para ganar confianza.
- Mirar vídeos tutoriales y campeonatos en vivo o grabados para aprender las reglas e identificar trucos de jugadores que se pueden poner en práctica.
- Los torneos de pádel son una excelente oportunidad para encontrar un compañero de juego. Se recomienda aprender antes a golpear con seguridad la pelota y convertirse de un amateur a un jugador promedio antes de buscar a una pareja, aunque existen campeonatos locales y clubes con lecciones particulares o grupales para aprender a jugar este deporte.
Los deportistas profesionales saben que para lograr sus objetivos, deben seguir un proceso de aprendizaje y entrenamiento progresivo y de largo alcance como en una maratón. La perseverancia y la paciencia son fundamentales. De nada vale obsesionarse y sobreexplotar las propias posibilidades físicas porque los riesgos de lesión son altos.
